Rocio O
2013-01-07 09:31:20 UTC
¿No es suficiente con el corte de pelo, el peinado, el maquillaje, el perfume, los accesorios, la ropa y el calzado? Estos son 7 elementos que ya de por sí son bastante arreglo como para añadir cualquier otra cosa o, lo que es peor, para quitarnos algo (o mucho) y dejar ver más de nuestro cuerpo, lo importante es saber considerar y expresar esos 7 elementos de nuestro arreglo.
Hay que tener en cuenta que, de la vanidad a la lujuria
hay solo medio paso; de la vanidad a la soberbia también hay solo medio paso, y los tres son desagradables para Dios. También es importante cultivar nuestra alma, no solo nuestro cuerpo.
• Algunas veces ¡Se habla del amor como si fuera un
impulso hacia la propia satisfacción, o un mero recurso para completar de modo egoísta la propia personalidad!
--Y siempre te he dicho que no es así: el amor verdadero exige salir de sí mismo, entregarse. El auténtico amor trae consigo la alegría: una alegría que tiene sus raíces en forma de Cruz. (San Josemaría Escrivá)
• "En estos momentos de violencia, de sexualidad brutal, salvaje, hemos de ser rebeldes. Tú y yo somos rebeldes: no nos da la gana dejarnos llevar por la corriente, y ser unas bestias. Queremos portarnos como hijos de Dios, como hombres o mujeres que tratan a su Padre, que está en los Cielos y quiere estar muy cerca —¡dentro!— de cada uno de nosotros".(San Josemaría Escrivá)
Muchas veces las mujeres se visten de forma provocativa y no lo hacen tanto por excitar a los hombres, lo hacen “simplemente” por vanidad y/o por quedar bien con sus compañeras, parientes, amigas, vecinas o conocidas, ya que se sentirían mal si ellas (sus conocidas) no aprueban su forma de vestir, sin embargo, tanto la vanidad como la excitación que provocan en los hombres son un pecado y yo te pregunto si vale la pena ofender a Dios por quedar bien con tus “amigas” o por lograr que los hombres te volteen a ver o para que te digan cosas bonitas o hasta groserías. Pienso que el Cielo que nos ha prometido Dios a los que cumplen sus mandamientos es mucho más trascendente que esos sentimientos de bienestar que te produce el vestirte de esa forma, pero si vives el Pudor por amor a Dios es mucho mejor para ti ya que no lo haces por el interés de ganarte el Cielo (que es bueno en sí, pero es mejor hacerlo por Amor). En cuanto a quedar bien con tus “amigas” te recomiendo que mejor quedes bien con Dios, Él es el único Amigo verdadero y que no traiciona, además; si ellas fueran tus verdaderas amigas no te invitarían ni te inducirían a vestirte de esa forma.
Tu cuerpo y el mío y el de todos los hijos de Dios es templo del Espíritu Santo, Dios nos lo dio para salvarnos y no somos dueños de ese cuerpo, El es el único Dueño. No podemos usar nuestro cuerpo para practicar el hedonismo, sino para servir a Dios, a La Iglesia y a la Humanidad, y para ganarnos el Cielo, que es para lo que nos creó Dios.
Muchas personas, especialmente Mujeres, se dedican a adorar al demonio mediante su cuerpo, ¿por qué tú y yo no aprovechamos nuestro cuerpo para adorar y darle gloria a Dios, y aprovechamos para desagraviar esas ofensas que se le hacen continuamente?
Por otro lado, el hecho de que a alguien le quede una prenda no siempre es obligación para usarla, ya que muchos diseñadores de modas no tienen una moral muy ortodoxa, o simplemente no la tienen, o no les interesa en lo absoluto la Moral, con tal de hacerse famosos y ganar dinero; y en vez de vestir a las mujeres las tratan de desvestir diseñando ropa cada vez mas provocativa para hacer que se vean más sensuales y se sientan más bonitas, lo que termina siendo, aparte de una ilusión, vanidad y sensualidad, en vez de tratar de destacar los valores y la personalidad propia de las Mujeres.
Igualmente, además de la ropa están los arreglos extremos del pelo, tratando de imitar colores de otros tipos de razas que, por otro lado, ni siquiera tienen los valores que tenemos en nuestra cultura y no se dan cuenta de que en nuestra cultura hay Mujeres igualmente o más bonitas que en otras etnias con el color original de nuestro cabello.
Incluso los dedos se han convertido en un motivo de Vanidad EXAGERADA ya que, el uso de uñas postizas está reservado para las damas que tienen compromisos sociales y que no tienen necesidad de trabajar, y no para las Mujeres que deben atender ya sea su trabajo, o bien, las tareas de su Hogar; da tristeza ver como empleadas de oficina (secretarias) o incluso obreras se afanan en adornar de esa forma sus manos. Además el uso de esas uñas resulta un lujo económicamente hablando.